* Raíces
Al Dr. Hugo Payen no lo conozco, salvo algunas referencias de mi papá fallecido hace 14 años, tampoco conocía sus dotes de historiador. La semana pasada repliqué en este mismo espacio –que no mi posición– algunos episodios del debate que abrió José de Gálvez, nombre del visitador español propuesto para el inexistente archivo histórico municipal de Los Cabos; aún no nace el archivo histórico y ya mataron al mensajero.
Payen se queja de que lo llame descerebrado en la entrega referida al visitador español, ¡increíble!, y advierte que no le interesa debatir con un desconocido, que “prefiere darle de comer a sus palomas pitayeras en la mañana, regar con su esposa el jardín que formó hace más de 50 años de casado y que no le interesa debatir ni ofender a nadie”; bienvenida y respetable su posición, y si le tiene miedo a la oscuridad que no salga de noche.
Pero el problema en sí no estriba en dejar de darle de comer a sus palomas pitayeras, ni dejar de regar el jardín que formó hace más de 50 años de feliz matrimonio, ni muchos menos la historia costumbrista que normalmente cuenta o la historia reciente de Héctor Palacios Avilés para acá que meridianamente conocen, sino cuando la nostalgia se convierte en pasión y esta en proselitismo, como está ocurriendo con el grupo Raíces liderado precisamente por él, y que utiliza como caballo de troya a Gabriel Fonseca, el cronista municipal que cobra en el Ayuntamiento de Los Cabos, y que enlodó al novel Coordinador de Derechos Humanos Municipales, donde los buenos deseos dejan de ser para transformarse en partidarismo; y a eso, es a lo que ha arrastrado a Raíces y unos cuantos partidarios para oponerse, –por sus pantalones–, a la propuesta del nombre de José de Gálvez para el archivo histórico aún inexistente en Los Cabos. Es decir, se oponen a bautizar a un ente que no ha nacido, que no ha sido parido operativamente; llama la atención que ahora sí se den cuenta de que la realidad de Los Cabos, económica, política, social y culturalmente, ya es otra totalmente distinta a cuando gobernaban los Canseco, los Aragón, los Arámburo, los Castro, los De la Peña; llama la atención que el grupo Raíces, quienes se reúnen todos los domingos a desayunar en tutti fruti , no se hayan dado cuenta de la extinción del Estero, del arrasamiento de Puerto Los Cabos en La Playa, del nuevo trazo carretero que cerrará a la circulación y al disfrute de kilómetros de playa para convertirlos en exclusiva zona de uso de gran turismo, de las invasiones de tierras ejidales, de los cientos de ejecutados que inició hace unos meses, de la proliferación de cantinas y cabarets, de tantas y tantas realidades que oprimen a Los Cabos, y que dividen a este maravillosos municipio en el de los pobres y el de los ricos; pero no ven sino la paja en el ojo ajeno y no se dan cuenta de la viga que tienen atravesada desde 1970.
Hugo Payen, que como galeno es apreciado en San José y rancherías, puede ser docto en temas anecdóticos y escribir folclóricamente de varios distinguidos cabeños de hace cinco o seis décadas, pero su profesión no lo preparó para conocer la historia nacional e internacional; y tan poco conoce la historia con rigor metodológico de ahí que ha tenido que echar mano de fuereños –arribistas– como Ramón Ojeda Mestre y José Manuel Villalpando, personajes con su historial de claroscuros, que no es necesario recordar, y que también son respetables, pero tristemente han sido utilizados para poner en la picota a José de Gálvez, al que una vez muerto, a fines del siglo dieciocho, sus enemigos políticos españoles y un que otro criollo buscaron desvirtuar y enlodar con evidentes propósitos de venganza política. Es decir, como que los fantasmas del pasado, han revivido para continuar una lucha que reproduce los añejos años de la colonia novohispana.
Hugo Payen ha llevado a Raíces a un terreno complejo y pantanoso de opiniones, como «sabelotodo» al que como cabeños y ciudadanos respetables tienen absoluto derecho; el problema es que en Los Cabos hay un grueso sector de jóvenes y profesionistas que no todos son como Gabriel Fonseca, impulsivos y manipulables, sino más calculadores y abiertos a la globalización que si tiene algo de bueno es en lo cultural, porque el mundo está abierto a la información, al conocimiento, a la participación. O sea que José de Gálvez, muerto hace más de dos siglos, ha revivido el viejo debate ideológico de víctimas y villanos, esquema tan utilizado desde la historia oficial para contarla e imponerla conforme a los intereses de la misma casta que sigue beneficiándose del poder, aliado con los intereses económicos de los que siguen siendo empleados desde la Colonia hasta nuestros días, mientras siguen adoctrinando a las masas populares con el garlito de los gachupines, la Malinche y los indígenas humillados –que tampoco son defendibles–, cuando la realidad fue y es otra, ciertamente cargada de violencia y abuso, mismos que siguen presentes y que son ignorados por un grupo que se autonombra defensor del regionalismo. Qué tal.
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SOBRE EL CABRESTO
Rigoberto Mares, Presidente del CDE del PAN en BCS, informó que fue todo un éxito los festejos del “Día del niño” en Loreto, evento que se llevo a cabo en la colonia INVI-Miramar de la cabecera municipal, con la participación de cientos de niñas y niños….En la tarde de ayer lunes, las autoridades locales de SEDESOL encabezadas por el Delegado en BCS, Juan Alberto Valdivia Alvarado, festejaron el X Aniversario del programa de Estancias Infantiles en el Estado, tras un lúcido evento realizado en el teatro de la Ciudad…..La administración municipal de Los Cabos que encabeza Arturo de La Rosa, ha instalado mesas en la SHyCP con el fin de gestionar mayores recursos federales para programas sociales, así como en materia de seguridad. La labor del cabildeo augura buenos resultados para el gobierno de Arturo De la Rosa…..El Dip. Joel Vargas, con fuerte presencia en el norte del estado, ha tenido el tino, la sensibilidad el oficio político de mantener esa cálida cercanía con sus electores…..Salud.
