ABCdario / ADLR ¡NO ME DEN POR MUERTO!

Ante el alud de comentarios que generó su interés de acreditar ante el IEE, tal como lo exige la ley, de ir por la reelección en la alcaldía de Los Cabos, el edil Arturo de La Rosa, tuvo que salir ante los medios de comunicación para hacer una “parada en corto” –como se dice en el argot beisbolero– a fin de aclarar malentendidos y augurios fatalistas; “la reelección es una opción más, el hecho que registre mis intenciones ante el IEE es con el fin de dejar constancia, no quiere decir que necesariamente vaya por la reelección, también puede ser una diputación federal o una senaduría” acotó ante el desbordamiento de comentarios que tempraneramente “lo daban por muerto”.
En entrevista televisada el pasado 16 de noviembre, ante las cámaras y micrófonos de Megacable, en el evento de inauguración de Chedarui , el alcalde cabeño fue muy claro en su exposición al sostener que “no es una definición total, simplemente dejar abierta esa posibilidad ante los tiempos legales que marca el IEE, si se decide ir por la reelección que no se cierre esa posibilidad, simplemente cumplir con lo que mandata la ley; ya veremos más adelante la decisión que tome en común acuerdo con mis colaboradores”, dijo: Dicho en otras palabras, no es un hecho que de La Rosa necesariamente vaya por la reelección como seguramente es el interés del grueso de los 12 diputados locales y de la alcaldesa de Loreto, que igualmente acreditaron sus intenciones ante el IEE de ir por la reelección.
Arturo de la Rosa, es hoy por hoy, de los escasos cuadros panistas que cuenta con capital político propio que si bien los números le dan para la reelección, así como el poder económico (recursos públicos) suficiente para armar un proyecto político de alcance estatal, la decisión final aún o está tomada, a diferencia de su colega de Loreto, Arely Arce Peralta, una buena chica cuyo mayor mérito político es y ha sido “nadar de muertito”; de los doce apóstoles (diputados locales) solo ellos saben qué es lo que traen para jalar votos en torno a sus proyectos políticos.
En el hipotético caso que de La Rosa se decida por la reelección, potencialmente enfrentaría un adversario fuertemente posicionado en Los Cabos como el ex gobernador y ex alcalde cabeño, Narciso Agundez, así como una figura emergente que poco a poco se ha ido abriendo paso despertando interés en los cabeños; Héctor Palacios Montaño, un joven priísta con chispa echado pa’ delante, fuera de ellos todo el terreno es parejo; si bien se maneja a Luis Klein como posible candidato independiente, no deja de ser un proyecto en ciernes y aún en veremos.
Desde esa perspectiva y a unos meses de que se tome la decisión, Arturo de La Rosa tiene amplias posibilidades de retener el poder y mantenerse a la cabeza de la alcaldía cabeña hasta el 2021, año que habrá de darse la sucesión de la gubernatura en cuya disputa final hay que sumarle a dos prospectos que también tienen lo suyo; el poderoso e influyente Secretario de Finanzas, Isidro Jordán Moyrón, considerado como uno de los grandes favoritos para el 2021, y el hacendoso y chambeador alcalde de Comondú, Francisco “Pancho” Pelayo Covarrubias, figuras que trabajan para aparecer en las boletas electorales en 2018, en lo que bien es la antesala de la gubernatura; el senado de la república.
Y un político “todo terreno” como De la Rosa que se mueve hábilmente en escenarios donde se toman las decisiones, pronto lo convirtieron en blanco predilecto de malquerientes quienes lo “daban por muerto” creyendo que la reelección era una muestra de “debilidad y agotamiento político” indexada en una decisión final mucho antes de la verdadera “puja” por las diputaciones federales y las senadurías; craso error, el “muertito que veis barrer, goza de cabal salud” respondería el alcalde cabeño, en sus declaraciones del miércoles pasado ante las cámaras de Megacable. ¿Quihúbole?.
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