* Buenas noticias
No todo son malas noticias. Ayer, Conafor –Comisión Nacional Forestal– dio a conocer que en los últimos siete años se incrementó la población de berrendos en el norte del estado en un 32%, al contabilizarse una población de 480 ejemplares, 155 más que hace siete años; ejidos de Mulegé como Emiliano Zapata tres, Benito Juárez, Lázaro Cárdenas, Gómez Palacios, Lagunitas, Héroes de Chapultepec, Mataranchos, Antonio Díaz Soto y Gama y el nuevo centro de población agrícola Guadalupe Victoria, son los protagonistas de este exitoso proyecto de Conafor.
La información publicada este martes por BCS Noticias, revela que son 41,988 hectáreas dedicadas a acciones de vigilancia para evitar la cacería furtiva, colocación de bebederos y comederos, instalación de cercas para delimitar al ganado y a depredadores y establecer áreas de manejo de diferentes etapas de crecimiento y desarrollo de la especie además de la instalación de torres de vigilancia, señalización, fototrampas, entre otras.
Tengo entendido que el proyecto a favor de la conservación y reproducción del berrendo en el norte del estado que maneja Conafor, fue puesto en operación por vez primera por Ford Motor Compañy, mediante una inversión millonaria que resultó un éxito hasta que metió sus sucias manos la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y los ONG’s, que al mantenerlos encerrados en espacios sumamente limitados perdieron sus genes salvajes convirtiendo el proyecto en un monumental fracaso; hoy los escasos berrendos sobrevivientes semi domesticados se pueden ver como vacas a orilla de la carretera sobre el corredor que va de La Bocana hasta Guerrero Negro; en los últimos meses han sido atropellados diez ejemplares.
Ante la amarga experiencia obtenida en la zona de la Choya, y al haber quedado dentro de una área natural protegida, los ejidatarios han decidido explorar nuevos planes de manejo que garanticen la conservación y reproducción de la especie, pero todo ha sido en vano; las reglas impuestas por la CONANP al área natural protegida han resultado insalvables, amén de la presencia y la fuerte resistencia de un ONG’s llamado WWW, que diseño el plan de manejo que hasta hoy ha sido un fracaso.
La supuesta población de berrendos que presumía Benito Bermúdez como resultado de un exitoso manejo por parte de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, fue un fiasco, un vil fraude de reproducción y conservación animal, tal como se puede constatar en la vasta zona de la Choya; los planes de manejo fueron diseñados por los ONG’s –como todas las operaciones logísticas de SEMARNAT, CONANP y CONAPESCA– y el berrendo criado en cautiverio se volvió manso convirtiéndose en fácil presa de los depredadores o del mismo medio donde no han podido sobrevivir por si mismos al perder sus genes salvajes.
Ante la traumática experiencia de la Choya, los ejidos que son el hábitat natural del berrendo requieren grandes extensiones de tierra donde el berrendo pueda ser vigilado, monitoreado y atendido en su hábitat natural, circunstancia que la CONANP, las leyes ambientales y los ONG’s sencillamente no lo permiten por tratarse de áreas naturales protegidas; de no lograrse un acuerdo de flexibilizar las reglas (leyes) impuestas por CONANP y la fuerte presión que ejerce el grupo ambientalista WWW, la suerte del berrendo estará echada como el de vaquita marina en el Alto Golfo, que gracias a SEMARNAR a y los ONG’s propiamente se extinguió después de que el gobierno federal invirtió en distintos proyectos de conservación diseñados por los ONG’s a lo largo de los último cinco años más de dos mil millones de pesos. ¡Qué tal!.
