Inicio En La Pluma De Del tintero DEL TINTERO / MÉXICO SIN MEXICANOS.

DEL TINTERO / MÉXICO SIN MEXICANOS.

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*Sudcalifornia, para los vecinos de norte América.

Más como un acto de creatividad, como sí de tratar la escritura de una narración de ficción fuera el caso, les cuento ahora, lo que la imaginación desborda, si la mirada se vuelve observación y la reflexión, emite su proceso analítico.

En México sin mexicanos, pueden ser páginas sueltas, que algún lector de lo absurdo, por levantar del suelo papeles que por su aspecto, parecieran no tener importancia, las levantó.

Es entonces, que el curioso de la lectura, empezó a leer…”La geografía llamada Sudcalifornia, quedó en completo abandono de sus moradores descendientes de los pobladores de los últimos cien años. La extracción de oro, contaminó y perforó la tierra, que un día fue un paraíso terrenal.

Apenas en un cuarto de siglo antes del principio del segundo milenio, surgió como Estado libre y soberano, la hermosa entidad, que en su forma de ínsula, tenía avecindados humanos nobles y bien pensados.

Es más, en su prehistoria, existen evidencias, de haber sido habitada por seres gigantes, que dejaron el testimonio de las llamadas pinturas rupestres, de esas que hay en varias partes del mundo que habitamos los humanos.

El planeta cambio radicalmente por el conflicto Estados Unidos de Norteamérica y Corea. Los mahometanos pusieron su sangría también.

Eso ocurrió después. Antes, sin pensar en tremenda catástrofe mundial. Norte América, se preparaba para tomar posesión de la geografía mexicana.

Éste objetivo se preparó con 50 años de antelación. Las partes coludidas de ambos países eran cambiadas de cuando en cuando; pero la misión de socavar la identidad mexicana y después demoler su voz y voto, para paralelamente, ir minando su fortaleza como nación, sangrando todo el país, se hizo presente.

Los gobernantes pasaron a ser “obedientes” a un poder oculto. “Un Frankenstein”, se diría de parte de la población. “Un poder superior a los poderes constituidos de los Estados Unidos Mexicanos”.

Tales fuerzas del desorden, fueron desplazados por batallones extranjeros, que como mandato del nuevo orden en el país, pusieron en su lugar: Sepulturas y extradiciones.

La gran catástrofe llegó cuando empezó la extracción de oro y demás minerales de Sudcalifornia. Fue para todos un calvario. Las ciudades y zonas rurales, mermaron su calidad de vida y se llegó a la conclusión que solamente los espacios de los pudientes y de la industria turística, contaban con blindaje al árido panorama en que se transformó la geografía que entre dos mares, el pacífico y el mar de Cortes o golfo de California, se vio reflejada como tierra de privilegios, donde solo los ponderados, sus cortesanos y sirvientes tenían derecho a vivir,a existir. Lo demás era tierra muerta, perforada, contaminada.

Sacar el gran lingote de oro que la tierra sudcaliforniana guardaba para sus moradores, fue una tropelía hecha por la industria minera. El despojo trajo destierro y nuevos moradores.
La fórmula de los pudientes, “corrompe, explota, saquea y sé más rico”, funcionaba en todo el territorio nacional.

Por todos lados fue minada también la identidad nacional, desde cambiar en los calendarios laborales los días de descanso de trabajo, para no permitir que la población trabajadora asistiera a los eventos de sus fechas históricas, cívicas, militares y civiles, hasta bombardear con anuncios subliminales que instaban a no tener recuerdos y pensar en un futuro incierto nada más.

Se desmanteló de defensores formales a millones de trabajadores, tras la caída de los sindicatos, que para el siglo XX, nada más rebuznaban convenientemente al poder en turno; pero eran obsoletos jurídicamente.

A cien años del segundo milenio, de la era cristiana, es intransitable en vehículos sobre la tierra. Solo naves de mar y de cielo circulan la media península.

La geografía que dejó vivir a gigantes de la prehistoria, luego a pericúes, cochimíes y guaycuras, y ya posteriormente a pueblos de La Paz, Mulegé, Comondú, Loreto y La Paz, gracias al agua limpia y pura que desde las alturas de la sierra de La Laguna se hacía recorrer por toda la entidad, resultó ser asunto del pasado.

De hecho, sudcalifornia fue geografía de oasis, en lo largo de su territorio. Ahora, es marte en la tierra.

Solamente hay bunkers de privilegio para el turismo de gran nivel. Con todos los servicios habidos y por haber, que nunca disfrutaron ni conocieron los moradores descendientes de nativos y humanos de arraigo en esa geografía, donde ahora, no se acercan ni los fenómenos naturales, conocidos con ciclones, huracanes, tormentas.

El agua de beber se trae de cualquier lugar sano del planeta tierra.

Dicen los científicos que el último tiro de gracia, será proveniente del gran terremoto que sacudirá y desaparecerá a las tres californias. Es cuestión de días. Hoy se espera el trueno de la bomba atómica en Japón, que también desaparecerá de la superficie del planeta. Luego, el mar pacífico se transformará en violento y en unas horas, nadaremos hasta no poder y desfallecer.

Las dos hojas rescatadas, formaron parte del libro, “Lo macabro de ser humanos”. Casualmente su contenido reveló al lector curioso, lo que vivieron los mexicanos, cien años atrás.